Guty Cárdenas (Centenario)

Centenario del Nacimiento de Guty Cárdenas.

Compositor de los himnos yucatecos:

“Rayito de Sol” y “Caminante del Mayab”, con letra del cantilenista Ermilo “Chispas” Padrón y el insigne poeta Don Antonio Mediz Bolio, respectivamente, Augusto Cárdenas Pinelo da lustre a su hermoso estado natal y se consagra como el máximo exponente de la trova yucateca.

Nuestro joven bohemio ---autor de un exquisito repertorio musical de boleros, claves y danzas inigualables que definitivamente, por su estilo y armonía enraizadas en la deliciosa música cubana sumada a la enorme sensibilidad artística de este gran compositor, que forjaron el sello de la canción y la trova yucateca--- vio la primera luz el día dos de diciembre de 1905 y nos abandonó un trágico cinco de abril de 1932.

La música de Guty Cárdenas, nos embriaga --como dice Baudelaire en su famoso poema-- y, nos deleita y sublimiza. Ahora que, interpretada por él, al conjugarse la belleza de su música con la belleza de su voz, verdaderamente las canciones llegan a lo más profundo del alma.

Esas joyas musicales interpretadas a dueto con Chalín Cámara y algunas voces femeninas, grabadas en discos de pasta de 78 revoluciones, son también de antología.

Afortunadamente existe una colección fonográfica que nos dejó Guty, músico y trovador incomparable.

En su obra grabada nos regala, también con su voz, bellísimas canciones mexicanas auténticas y tradicionales, de dominio público y de inspirados músicos que fueron sus contemporáneos, tanto mexicanos como yucatecos, mostrando de paso, una total ausencia de egoísmo y un sincero reconocimiento a la obra musical de otros compositores.

Con sólo veintiséis años de existencia en este mundo y a más de setenta años de su desaparición, Guty Cárdenas se yergue con vigor y juventud en la historia del arte musical de Yucatán, de México y del mundo entero.

Escuchar las notas de “Yucalpetén” y del “Caminante del Mayab” nos lleva en viaje imaginario a las fabulosas ciudades y santuarios mayas prehispánicos a través del sacbé y los henequenales, hasta cruzar el horizonte, invadidos de nostalgia y melancolía por la destrucción del gran pueblo maya, creador del universo.

Escuchar el “Rayito de Sol” tan admirado en la misma Europa, que nos ha dado a los más grandiosos músicos de la historia, es llegar con la frescura de la mañana, intangible, en ese rayo de sol, a acariciar en su lecho a la mujer amada.

“Para Olvidarte a Ti” cuyo sentimentalismo musical arranca lágrimas mientras la hermosa letra de “Chispas” Padrón nos describe la incomprensión de la musa inspiradora.

“Ojos Tristes”, “Quisiera”, “A que Negar”, “Peregrino de Amor”, “Fondo Azul”, “Golondrina Viajera”, “Nunca”y dos o tres decenas más de verdaderas reliquias musicales, siempre en boga, colman los ámbitos bohemios generación tras generación sin importar el transcurso de los años. Guty musicalizó los más hermosos versos de poetas yucatecos y mexicanos de la época: Antonio Mediz Bolio, Ricardo López Méndez, Luis Rosado Vega, Ignacio Magaloni, Antonio Plaza, Ermilo Padrón López, Federico Gamboa (hijo) y otros poetas y cantilenistas de entonces.

Pasan los años después de su muerte y sus composiciones se arraigan más y más en el gusto musical, ya no digamos en Yucatán, Campeche, Quintana Roo, Tabasco y Chiapas, sino en la Ciudad de México, capital del país en donde los capitalinos se apasionan de la música de Guty (y en general de la música yucateca) y después de la diversión del cabaret o de la función de teatro, buscan los sitios bohemios de trova yucateca.

En las serenatas, tan de moda en ese tiempo, predominan las canciones de Guty quien cubre así con su obra artística esa hermosa etapa de la vida nocturna del Distrito Federal; y el “Rayito de Sol”, “Nunca” y “Quisiera” se escuchan noche a noche en los balcones y rejas de las viejas calles de la Col.Roma, Sta. María, San Rafael.

El legado de Guty, como el de los más afamados compositores de música clásica, es para la eternidad. Su música siempre resurge entre las cascadas de “cascajo musical” con el que abruman al pueblo mexicano los medios de comunicación manejados en su mayoría por gente perniciosa carente de un mínimo de cultura musical.

Guty Cárdenas: ¡Orgullo de la Tierra del Mayab”!

Dzunum