“Y cualquiera que escandalizare a alguno de estos
pequeños que creen en mí, mejor le fuera que se le
colgase al cuello una piedra de molino de asno y
que se le anegase en el profundo de la mar”.
Mateo: 18, .6.
Semana
Santa 2007
Semana Santa 2010
(Para vomitarse: este tema que vuelve a la palestra con más
fuerza, marzo 2010)
Si Dios llegara a perdonar el repugnante crimen de la pederastia, el
universo se manifestaría en su contra. No puede haber otro crimen peor; y
que lo practiquen impunemente los que se dicen representantes del Creador
en la Tierra, ¡eso ya es un asco!
“Más de cuatro mil curas pederastas en EE UU y once mil denuncias de abusos
en su contra”, leemos.
Es alarmante la cifra de los pederastas eclesiásticos en EE UU, pero ¿cómo
andaremos en México?
Por lo pronto la prensa informa que nuestro país es refugio de sacerdotes
pederastas: Concretamente, cuarenta de ellos han salido huyendo del vecino
país del norte y se encuentran aquí, protegidos por la iglesia católica
mexicana.
Después de haberle desgraciado la vida a --sólo Dios sabe a cuántos
niños—el flamante Congreso toma cartas en el asunto:
El senador del PAN, Alejandro González Alcocer propuso una reforma al
Código Penal para obligar a las asociaciones religiosas a inhabilitar a los
sacerdotes que incurran en actos de abuso sexual contra niños, retirándoles
el registro ante la
Secretaría de Gobernación así como a las Iglesias que los
solapen. La tibia y estúpida sanción propuesta está siendo “analizada” por
el Senado de la
República (donde… ¡damos resultados!, dice la imbécil
propaganda mediática de la cámara alta)
¡Qué le parece apreciable lector! ¡Todavía van a analizar la reforma que
propone el tal senador! ¡Como si hubiera propuesto que anatematizaran y
además colgaran a estos indecentes y desequilibrados ofensores del cielo!
Entérese del “castigo” impuesto al “ilustre pederasta” michoacano, fundador
de Los Legionarios de Cristo, por parte del Papa Benedicto XVI según el
siguiente comunicado:
“El Vaticano invita al fundador de los Legionarios de Cristo, el reverendo
Marcial Maciel Degollado, a que se dedique a una vida reservada de oración
y de penitencia, renunciando a cualquier ministerio público". El
comunicado descrito es de fecha 19 de mayo de 2006.
El religioso mexicano está siendo investigado por abuso sexual a
seminaristas. El Papa lo debió haber excomulgado, por lo menos. (Tal vez lo
hubiera hecho si se tratara de un islamita).
Y hay más:
El dignatario de mayor jerarquía eclesiástica (mexicano) en nuestro país,
Cardenal Rivera Carrera, ¡Qué desgracia!, demandado ante una corte
estadounidense por “conspiración internacional a la pederastia” más otros
cargos relacionados con el presunto encubrimiento al sacerdote pederasta
Nicolás Aguilar, ex empleado del purpurado y responsable de abusar de
noventa niños en México y EE UU.
La parte acusadora, la integran Michael Finnegan, abogado del despacho de
Jeff Anderson, y David Drivon, de una firma legal de Stockton, California,
EE UU.
Uno más: “Jalisco, México (26 Sep 2006).-A pesar de que estuvo preso dos
años por abusar sexualmente de un monaguillo en Aguascalientes, el
sacerdote Alejandro Cervantes Gallardo sigue oficiando misas, pero ahora en
la comunidad jalisciense de Matancillas”. El Obispo Godínez de
Aguascalientes dice que ya se reformó después de sólo dos años que estuvo
preso. ¿Usted cree lo de la “reformada”?
Entre abominables pederastas y los vividores Onésimos, Sandovales, Godínez,
etc. etc., están dando al traste con la iglesia católica y la fe de los
creyentes.
Por fortuna en México tenemos todavía sacerdotes dignos de su investidura
como Samuel Ruiz García, Obispo Emérito de San Cristóbal de las Casas,
Chis. y Raúl Vera López, Obispo de Coahuila.
Personalmente tengo gratos recuerdos de verdaderas figuras de la iglesia en
México como Mons. Luís Mª Martínez, Arzobispo Primado de México.
Dzunum
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